lunes, 22 de diciembre de 2014

Con la muerte en los talones (Aka North By Northwest)

4*
Dedicada a Orit A. Amar
Un ejecutivo de Madison Avenue (Cary Grant) es confundido con George Kaplan, un agente de la CIA, lo que le coloca en una trama rocambolesca y perfectamente olvidable en la que será secuestrado, perseguido, atacado e, incluso, se enamorará de una hermosa mujer. En esta trama, Grant será acompañado por sus partenaires, James Mason, Eva Marie Saint y Martin Landau. Durante las más de dos horas de película, Hitchcock irá zarandeando al protagonista del film y a los millones de espectadores del mundo entero que han sido arrastrados por esta presa desbordada de puro entretenimiento. Como decía el propio Hitchcock, North by Northwest es una broma contínua, inverosímil, que prefiere hacerse pasar por una película de intriga y de suspense. Por eso, pertenece a esa parte de su filmografía que Truffaut denominada “los tormentos de un inocente perseguido”: un auténtico “melodrama de la caza del hombre”. Hitchcock sigue con sus tramas pesadillescas, repletas de casualidades y misterios, donde la “lógica de los sueños” se desarrolla mediante una historia que pretende asirse a lo verosímil desde postulados fílmicos bastantes abstractos. De ahí la importancia de la imagen y del montaje, más que del guión, así como de algunas secuencias clave. El resultado es un cine de situaciones, del que hablara Truffaut, más que de personajes (una de las grandes carencias del trabajo del orondo director, según sus propias palabras). Por eso, en la memoria del espectador siempre estará ese Cary Grant corriendo por una carretera polvorienta mientras un aeroplano intenta matarle pasándole por encima. O a ese mismo Cary Grant, en su casi despedida del cine, descendiendo por las caras presidenciales del monte Rushmore. O la escena de la ONU.

2 comentarios:

  1. Gracias!!! Justo para Navidad! Te diría: te quiero, pero es un blog de cine y además nunca hablo de amor antes de comer. Es brillante la película, a que sí? Todo lo que se puede decir de ella es poco. Me gusta el argumento, los giros que da, los actores, la fotografía. Cada imagen es como un cuadro. La composición es perfecta! El balance entre humor, amor, misterio y suspense es difícil de conseguir. Acabo de ver varios momentos de nuevo y disfruto igual o más que antes. Cada ves que se ve, se descubre un detalle más. Hace unos cuatro años por esta época tenía una foto de la actriz en esta película, pegada a la pared de la oficina donde trabajaba. Pensaba que igual mirándola fijamente todo el día podría alcanzar su perfección. Hoy ya no me gusta tanto. No veo tan perfecta su actuación. Es cierto que es una película de situaciones, pero que situaciones! Todo memorable. Es cierto que los personajes no tienes desarrollo, ni falta les hace. Siempre he pensado que libros y películas se tienen que examinar en el contexto de su propio genero. Me gusta que Cary Grant esta siempre perfectamente trajeado y sin despeinarse. Felices fiestas, Zineface! Esperando la próxima pastilla! "Mademoiselle O"

    ResponderEliminar
  2. Querida Orit: muchas gracias por tu post, por tus palabras y por tu amor descontrolado. Da gusto tener lectoras como usted. Zineface está de acuerdo con todas y cada una de las palabras que compartes en el blog. Y no puede por menos que regodearse en la idea de que ha sido Hitckcock, y no otro, el que ha puesto de acuerdo a dos almas tan diferentes. Una conquista más del orondo director. Felices fiestas también para ti (y para los tuyos). Un abrazo bien grande y lo mejor para esta salida del año (y que no se entienda mal la expresión, por favor). Y muchas gracias de nuevo, por todo.

    ResponderEliminar